Por Susana Quiroz Saavedra
Ayer mi computador cayó en coma, sencillamente dio un último suspiro y se apagó. Es verdad que tiene sus años, unos 8 diría yo, pero ¿por qué el maldito tenía que hacerlo justo en el peor momento?.
Esperaba correcciones de un trabajo, noticias de otro, además de bastante información que tenía que "googlear"... entonces, ¿qué "@/&%##" hago?. No es la primara vez que me ocurre algo parecido.
Contagio de viruses, se quema el cable de poder, un corte de luz justo cuando enviaron un trabajo urgente, estamos tan acostumbrados a contar con esta maravilla llamada Internet, que te permite una conexión y acceso global a millar de información y de personas, que cuando la red se nos cae... parece el fin del mundo.
Imagínenlo a gran escala, lo que pasa a diario... No hay sistema y todo se paraliza, somos completamente incapaces de reaccionar.
Internet llegó a nuestras vidas para cubrir todas nuestras necesidades, pero ¿qué pasa si algún día sencillamente desaparece?, ¿qué pasa si no podemos conectarnos más?.
Bueno, mientras tanto, menos mal que existen los cafés con Wi-fi.
